¿Qué hacer sin ti? ¿A dónde ir? ¿Podré soportarlo? ¿Podré volver a acostumbrarme a estar solo?...
Este tipo de preguntas son las que me tuve que hacer y no me hice.
Actuar mediante impulsos nunca se me ha dado bien, yo soy más de pensar antes de hablar.
Se que jamás podría deshacerme de ti. Estás en cada día, en cada recuerdo, en cada foto, en nuestro hijo, en mi piel, en mi corazón. Estás en tantos sitios...
Sería imposible para mi empezar de cero como si nada, imposible.
Has contaminado con tu presencia toda mi vida.
Llevas tanto tiempo en mi vida, que no recuerdo nada más.
Te amo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario